viernes, 25 de mayo de 2012

A locas con los bares

Y seguimos abriendo locales… no es normal, de verdad, que no se puede abrir todas las semanas tanto bar y pensar que va a funcionar. Que por mi y mis compañeros, estupendo, que abran y abran y que no demos abasto para que no digan que sobramos y que nos rascamos la nariz o la barriga, pero no es lógico que en un pueblo de unos 7000 habitantes que cuenta ya con sus cuarenta y tantos establecimientos de hostelería sigan abriendo bares, restaurantes y locales de comida para llevar… que en dos semanas pasamos de los cincuenta… y si ya digo que en uno de 1500 habitantes en una semana se han abierto: un supermercado, una carnicería, dos bares y una panadería, cuando ya había dos supermercados, cuatro carnicerías, ni sé la de bares y tres panaderías… que no, que no me salen las cuentas para que sobreviva tanto negocio. Y no cuento los traspasos que es un chorreo constante de ahora lo cojo, ahora lo dejo, ahora lo coge otro, ahora lo deja…

Ya sé que la cosa está jodida y que la gente busca un negocio para sobrevivir pero:

a) los locales por aquí siguen hipercaros, más que en una capital (sin exagerar) y poner mil y pico euros en cafés para el alquiler es mucho café;

b) la luz está por las nubes y mantener las cámaras, arcones congeladores, vitrinas y demás es un coste que no se plantean al empezar y luego que si apago esto, subo el termostato para que no se encienda tanto el motor… la cadena de frío ha pasado a ser cadena de calor…

c) muchos creen que con saber hacer unos huevos con patatas se sabe cocinar y que porque les gusta hablar, saben del trato con el público… y muchos no han limpiado en su casa el fregote de una cocina tras una comida familiar como para saber apañárselas con un servicio de comidas… también es cierto que empiezo a encontrar a personas que se preocupan por aprender, buscan cursos y te llaman para que les atiendas en algún momento y aparecen con sus preguntas y dudas escritas en un papel… y en cuanto a carnicerías, miedito me da el dedo de alguno (tengo en la cabeza a un chico que era albañil y que me decía que no debía ser tan complicado descarnar… yo por si las moscas le he aconsejado un guante de cota de mallas… ya veremos cuánto tarda en meter la mano en la picadora… que este año llevamos tres, que yo sepa, por la zona)

Esta mañana, mientras hacía un par de informes pendientes, han venido dos personas a preguntar sobre bares y otro a preguntar cómo se hacen las gestiones para organizar un festejo taurino porque han cambiado a toda la junta de una peña taurina encargada de las fiestas de un pueblo y no saben por dónde les da el aire. Al final todos se han llevado sus correspondientes impresos, instrucciones e información y todos han preguntado: ¿Cuánto te debo? Nada. Y te miran extrañados hasta pensando que estás chalada. No hay tasa por facilitar información ni por dar y gestionar unos tristes impresos… todo se andará, supongo, porque a lo mejor deciden tarificar el minuto de información, o el sentarse en una silla en el despacho, quién sabe… aunque a este paso, a lo mejor ante esa pregunta, tengo que contestar que la voluntad, o que me traigan un folio para poder imprimir el impreso, o un boli o que hagan una colecta para un cartucho de tinta…

No hay comentarios:

Publicar un comentario