Formación

Si algo agradezco a la Administración, es la posibildad de realizar cursos de formación. Es cierto que hay años que no te seleccionan para ninguno o que la bolsa de cursos no se ajustan a tu trabajo ni guardan ninguna relación contigo. Algunos te dejan machacada, otros son después de trabajar (y si vives en la capi pues bien pero sino, prepárate un bocata y sal corriendo para llegar)... de todas formas, son voluntarios (salvo contadas excepciones) y sobretodo son gratis (que después de gastarte pasta en cursos de mierda, es muy de agradecer)

Cuando me incorporé a esta Administración estaba verde, verde... como las lechugas. Me defendía en sanidad animal pero de higiene alimentaria sabía la teoría pura y dura que había estudiado para las oposiciones. Asi que cuando me dijeron que había cursos de formación voluntarios después de trabajar, me apunté a todos. Creo que a mis jefes se dieron cuenta de lo lechuguina que estaba y sorprendentemente me dieron todos los cursos que pedí. Resultó agotador porque salía de currar, me comía un bocata corriendo, salía con el coche pitando y llegaba al curso justitito justito... para luego salir de noche llegar a casa y a dormir directamente.

Aparte de para aclararme muchas cosas y otras enredármelas más, me sirvió para conocer gente...

Tras el atracón inicial me dí cuenta de que en los cursos siempre coincidíamos los cuatro tontos de siempre y que la gente con los años pasaba de ir renovando conocimientos (entendible si tienes hijos o estás estudiando opos, o si es invierno y las carreteras están heladas). Lo que me sorprendió y aún me deja un poco alucinada es que algunos dinosaurios, desde que tomaron posesión allá por los ochenta, no han hecho ninguna formación, y lo más curioso es que llevan a gala su formación ya caduca... aunque en algún caso les están obligando a hacer un reciclaje.

Es cierto que algunos cursos, tras hacerlos sigues saliendo pez, pero en otros, aunque sea un pequeño esbozo, te quedas con unas cuantas ideas y de allí, si quieres, te molestas en indagar más y profundizar.

Ya hice el firme propósito de al menos cada año pedir unos cuantos cursos. No siempre te seleccionan para el que más te gustaría hacer, pero, me parece poco ético, no hacer uso de la posibilidad de reciclarme y sobretodo considero que hay que ir actualizando formación y no quedarse obsoleto. Ya no en higiene alimentaria sino en manejo de ordenador o en perfeccionamientos varios... he de reconocer que jamás me apuntaré a los de asertividad y rollos de esos de mejora del entendimiento en grupo y comunicación de malas noticias y esas cosas... más que nada porque paso de realizar las prácticas con gente que no conozco (hice uno y lo de intentar ser asertivo y esas cosas, como que no funciona en este trabajo).

ASí que este año he debido pedir como diez cursos (con un poco de suerte me seleccionarán para dos o tres)... acabo de hacer uno, que hasta el tercer día no le encontré la lógica, pero ese día compensó todo lo anterior y hasta puedo decir que me han quedado algunas cosas bastante claras.

Jo, el que nunca me dan es el de conducción con situaciones climatológicas adversas... ese me iría que ni pintado para ir a casa en invierno