Ya voy, ya voy

Mi hermana ya me estaba recriminando hasta por el feisbú que escribiera, además de llamarme vaga… venga, toma, lee y calla…

Sigo con mis historias con los “tenedores” y rollos de etiquetado… debo de haberme vuelto una tiquismiquis porque no paro de encontrar etiquetados incorrectos… lo que conlleva un porrón de trabajo y hasta recogidas de productos por parte de algunos fabricantes para reetiquetar (seguro que estoy en las oraciones nocturnas de alguno de ellos, y no precisamente deseándome bendiciones)

Otro frente de batalla que se me ha abierto, sin quererlo, es con algún listillo comercial de mezclas para la fabricación de preparados cárnicos… entre que unos no leen las cosas y el otro es un jeta, lo que nos encontramos son carni-salchi que están haciendo chorizo fresco y salchichas frescas usando mezclas (polvos o especias, dependiendo del carnicero) que son para productos curados… o una mezcla de varios porque según el comercial salen más jugosos, con un color espectacular y duran un montón… toma, claro, le estás echando un huevo de conservantes… Según el comercial, los veterinarios que hacemos inspección no tenemos ni puta idea y claro, son más fiables ellos que nosotros para poder saber qué diablos se puede usar para hacer “embutido” fresco.  Si es sencillo, si en la bolsa de las mezclas viene “preparado para salchichón curado”, ¿para qué demonios lo usas para chorizo fresco? Además hay unas bonitas normas  en las que te indican qué se puede añadir a qué… nadie se las sabe enteras, aunque algunos cachos acabas memorizándolos, pero son muy sencillas de consultar, aunque todo es querer…

De todas formas que nadie se preocupe, que no vamos a poder hacer inspección porque no tenemos medios para repostar combustible… las gasolineras que tenían convenios con la administración autonómica te dicen que no puedes repostar allí (y lo entiendo porque no les pagan) y para otras gasolineras tiramos de tarjetas… y si no nos dan, los coches se quedan en la reserva… y con la reserva más de 50-60 km mejor no hagas por si te quedas tirado… y claro, si tengo que ir a un pueblo a 87 Km, andando no llego.

Pon de tu bolsillo, dicen algunos… ya, y luego me lo devuelven? pues no, porque no está presupuestado. Pon tu coche… muy bien, pero tampoco está presupuestado que me paguen los desplazamientos… Que te fíen en la gasolinera, se le ocurre a otra… Venga señor Repsol, póngame un cuarto de depósito y prometo pagarle el mes que viene…tenga como aval la medalla de San Cucufato al que mi abuela tenía especial predilección por poner en práctica técnicas de BDSM… adelanta la pasta y luego usa las tarjetas para repostar en tu coche… ya, y el menda de la gasolinera piensa que estás usando los medios públicos para tu uso privado y se lo larga a su compañero, a su prima y a su colega y ya hemos hecho una bola de nieve estupenda…

Ya me hecho hoy un paseito para ir de inspección a un par de sitios pero ya me contarán cómo la semana que viene nos hacemos los 90 Km para llegar a un matadero a cubrir el servicio de un compañero que se marcha de vacaciones… ¿le digo a la veterinaria a la que le toca la rueda que salga el viernes con la mochila con los bocatas y la tienda de campaña para que llegue el lunes a las ocho de la mañana?

Está claro que tendremos que usar nuestros vehículos y pagar nuestro desplazamiento, al igual que ponemos nuestros bolis, pagamos pilas para los termómetros y demás chismes, lavamos las batas sangrientas y ponemos nuestra cámara de fotos y ordenador particular… al igual que ponemos la cara, ponemos el culo… me gustaría saber dónde coño se queda la pasta  de la administración porque a los mindundis nos tienen olvidados como apestados miembros de la casta de los intocables, pero la crème de la crème sigue dándose opíparas comilonas tras sus reuniones sobre “de dónde ahorrar”.