lunes, 5 de diciembre de 2011

El día en que…

El día en que nos creímos ricos un café con leche nos costó 1,20 € pero  no nos importó y lo acompañamos de un cruasán, el sol brillaba, la tele resplandecía de anuncios que nos ponían sencillo darnos dinero para todo.

El día en que me dieron las notas de 8º de EGB, mi madre me preguntó que qué quería y yo le pedí “El señor de los Anillos”. Cuánto pesaban los libros camino a casa, pero qué afortunada me sentía... dos semanas inmersas en aventuras.

El día en que nos dimos cuenta de que nunca habíamos sido ricos, hizo sol y me fui de compras, pero todo me pareció carísimo y volví con las manos en los bolsillos.

El día en que conocí a La Rubia me pareció un tipo raro… raro, raro… y no supe si me caía simpático o no.

El día en que me fui a ver Mordor llovía a cántaros y por el cristal del coche solamente veía gotas y gotas y no era capaz de distinguir si era lluvia o es que estaba llorando.

El día en que aprobé la carrera debía hacer calor, porque todos iban de manga corta pero yo estaba helada esperando a que colgasen las notas de la última asignatura y cuando vi mi nombre y la nota, lloré hasta que me cansé… tal berrinche llevaba que algunos pensaban que había suspendido.

El día en que me lié con La Rubia era la champanada de la facultad… acabé en una clase de derecho oyendo hablar de la ley de costas con un pedo importante… fui incapaz de ir a la cena con los amigos y acabé durmiendo la mona ante el descojone de mi padre… uf, ha llovido desde entonces…

El día en que me hice autónoma tuve que pedirle pasta a mi madre porque no tenía ni un duro para pagar nada… me costó casi un año devolverle todo el dinero.

El día en que jugábamos un partido importante en el equipo de baloncesto del colegio me dolía horrores un tobillo porque recogiendo la mesa había saltado para dar con la mano en el techo y me lo había torcido… el partido fue duro, para ser unas niñatas, y sudé como en la vida… tres meses de escayola y el peroné roto por dos sitios.

El día en que firmé mi primer contrato como veterinaria de sanidad no pude dormir en toda la noche de los nervios. Entré a trabajar a las seis de la mañana, salí a las dos a comer al bar de jubilados y a las tres enganché de nuevo hasta las nueve de la noche… así 21 días de frio invierno durmiendo en una pensión viejísima y pasando un frío de cojones en un matadero… de nuevo tuve que pedirle dinero a mi madre hasta para comer y su coche viejo para poder llegar… el sueldo se convirtió en menos de medio sueldo cuando le devolví la pasta.

El día en que me di cuenta de que estaba embarazada, llevaba dos semanas encontrándome fatal. En Mordor, qué horror pensé, no es lugar para criar ni a un chimpancé… pero ya habría tiempo para solucionarlo; un mes más tarde se fue todo a tomar por saco y Mordor se tornó más gris si cabe…

El día en que vuelva a casa, la juerga durará tres semanas… y seguro que como siempre protestaré por algo… igual que protesté después de que dije que si aprobaba la química, no protestaría nunca más… igual que prometí no quejarme si conseguía aprobar una oposición y luego me he quejado y lamentado… al igual que cuando… y cuando…

El día en que todo me parezca bien, la habré cagado, seguro…

6 comentarios:

  1. ¿De dónde te viene la inspiración para escribir tan bien? Igual es el aire mordoriano y tú no lo sabes apreciar:-)
    Una vez más, gracias por tus entradas

    ResponderEliminar
  2. Y no me cansaré de repetirlo... ESCRIBE

    ResponderEliminar
  3. Lo mismo digo ...escribe ...cada dia al volver del trabajo compruebo si has puesto algo .Cristina

    ResponderEliminar
  4. Lo mismo digo, sigue escribiendo, me gusta leer tus entradas....

    ResponderEliminar
  5. Gracias, ¿seguro que La Rubia no os ha pagado unas cañas? Se pasa media vida mandándome a escribir... según nuestro cuento de la lechera particular, él será mi editor y yo escribiré un best-seller y de allí a la casa del libro... es que ya estamos mayores para montarnos una banda de rock...

    ResponderEliminar
  6. comentarista mileurista (por ahora...)7 de diciembre de 2011, 0:28

    ¡Cómo mola!, tú te haces famosa con tu best-seller y los comentaristas de este blog pasaríamos a comentaristas de tus miserias y alegrías en cualquier programa del corazón y todos a montarnos en el dólar

    ResponderEliminar