lunes, 26 de diciembre de 2011

Recopilando el 2011

No ha sido de los mejores y supongo que tampoco será de los peores… toda puñetica tiene su compensación… A nivel personal, que no laboral:

Nos despedimos de familiares que habían disfrutado de una larga vida, algunos quizás resistieron más de lo que tocaba… Para compensar la balanza se esperan nacimientos para principios de año; primas y amigas se han puesto al asunto… y ya me tienen hartita con el ya te toca…

image

Una de mis hermanas ha pasado un año jodido entre migrañas y su tratamiento y aunque no lo quiera reconocer, le han “roto” su corazoncito… para compensar tiene un par de años de duro pero buen trabajo entre buena gente (luego ya veremos qué pasa) y una pandilla de amigos que le han arropado en sus momentos blanditos.

La otra,  mucha currada de proyecto… en casa han flipado por su exposición de fin de curso… es verdad que nunca la habíamos visto tan concentrada en algo… aunque luego parezca que no ha pasado de la adolescencia más terrible… claro que cuando quiere parece hasta buena…

Este año he leído más (llevo contadas 102 novelas y no sé si me dejo alguna, algunas bodrios y otras que me han encantado), he escrito menos y no he encontrado novedades musicales que me hayan llamado la atención. He vuelto al deporte-deporte, del de sudar, aunque sigo con el yoga (camino del noveno año)

Nos hemos quitado de casi toda la tele… menos del baloncesto y de los documentales de historia y ciencia de La2 y alguna cosilla más. Nos hemos quitado del cine, hartos de móviles, palomitas y susurros de las butacas vecinas y de saltos de imagen y sonido de las salas y hemos ido a menos conciertos, no por falta de ganas… Las noches de sofá con libro se están convirtiendo en la tónica habitual… no me extrañaría que un día el perro se pusiera con nosotros a ojear una revista…

La Rubia se ha vuelto un experto en cervezas… ahora le ha dado por una taberna de escoceses en la que un pelirrojo tira la cerveza como si le fuera la vida en ello, concentrado en que la espuma sea perfecta, reposar y de nuevo a llenar… yo pensaba que eso no se notaba pero cambia la textura por completo…

Hemos reencontrado a algún viejo amigo, a algunos a través del facebook, hemos conocido a amigos de amigos que han resultado gente divertida para viajar…

Lamentablemente seguimos en Mordor y no será por peticiones de traslado… al menos La Rubia, que podría llevar años en Zaragoza, todavía me quiere lo suficiente para quedarse conmigo en este destierro…

1 comentario:

  1. No ha sido un mal año entonces... ya me hubiera gustado a mi leer un poco más y comerme la cabeza un poco menos... espero que este sea algo mejor y vuelva a las antiguas costumbres de practicar más deporte y compartir buenos ratos con mis amigos, los de siempre y los nuevos.

    ResponderEliminar