lunes, 26 de enero de 2015

Personajes de Mordor

Por Mordor y aledaños, como en todas partes, hay personas un tanto originales… además de Cariño, que ya tuvo su entrada particular, tenemos otros curiosos especímenes, por ejemplo:

- Inquietudes es un chico raruno que según nos contó, estudió informática pero que trabaja de vigilante nocturno y en teoría quiere dedicarse a la “miel gourmet”, sea eso lo que sea… la mezcla de ideas fantásticas (mi cuento de la lechera queda en mantillas) más su suegro hippy hacen una combinación espectacular… y sí, hoy también ha llamado por teléfono con sus inquietudes… siempre comienza igual, hola tenía unas inquietudes y te llamo para preguntarte porque me como el tarro y luego me agobio y le doy vueltas a la cabeza y me da la paranoia… y un día me llama por la lejía y su filosofía de si es dañina para la salud, otro para que opine si el tipo de los envases le puede estar timando con el precio, el siguiente es para preguntarme cómo extraer el veneno a las abejas, el siguiente que si la etiqueta queda mejor en color anaranjado o en amarillo clarito, que cuál parece sintonizar más con la miel… si fuese al trabajo con tragos sería genial para pasar el rato, pero con la mesa llena de cosas y pendiente de inspecciones, que se me tire hablando cuarenta minutos me acojona, así, tal cual… y sí, soy educada y le contesto todo lo que puedo y a veces le doy algún teléfono para que se informe o le busco alguna cosa para mandarle por mail… pero no quita para que cuando le oigo me entren ganas de darme al alcohol…

- La familia carcelaria es tal cual, una familia donde todos han pasado por la cárcel… ir a alguna de sus carnicerías da un poco de cosica… no sabes si vas a encontrar algo en la cámara, un alijo en las bolsas de especias o si estando de inspección va a llegar la Guardia Civil y te van a llevar al calabozo… obviamente nuestra imaginación desbarra pero es que te los imaginas con camisetas a rayas y no desentonan con los hermanos Dalton (gondoleros no parecen). Siempre estamos con las teorías de que las carnicerías y las furgonetas de reparto son tapaderas del negocio real, pero, por favor, no quiero encontrar nada que no sea carne de animal doméstico y adobo jamás… y eso de la mesa supongo que es harina…

- Los Piscina, tienen abierto el bar de la piscina aunque estemos a -8ºC. El ambientador es olor a porro día sí y día también. Más de una vez, con los vasos abiertos, nos hemos encontrado al socorrista tirado en la camilla fumando un porrito y tan a gusto. La cocina es un poco de callejeros y sus reportajes, así que ir allí de inspección es una aventura de la que sales con ganas de respirar aire fresco.

- El Ladillas, camarero con más años que un dinosaurio y la maldita costumbre de recolocarse, tocarse, ordenarse o yo no quiero saber, por la zona de la cremallera del pantalón… queda de cojones en el servicio de comidas del restaurante y no merece más comentarios

Otro rato más…

sábado, 24 de enero de 2015

Cosas no tan superadas

Uno piensa que las empresas grandes o con bastante volumen de negocio, tienen un sistema digamos coloquialmente “apañado” de control alimentario… al menos cuando vas te tratan como un espía potencial y hasta te hacen firmar acuerdos de confidencialidad o algo así… no te dejan hacer fotos, ni te facilitan documentación fuera de la industria y a cuenta gotas te enseñan un mísero papel… Parece todo tan moderno, tan aséptico, tan industrial que parece que estás en la nave de 2001 una odisea en el espacio de Kubrick…

Pues como sucede a veces, nada es lo que parece, ni lo que crees es cierto, ni lo que no ves no sucede…

Pongamos un par de ejemplos… empresa de snacks variados… en junio ya detectamos deficiencias en el etiquetado… algo tan sencillo como que el envase pone “Patatas fritas en aceite vegetal; ingredientes: patatas, aceite vegetal y sal”… pero el envase es semitransparente y lo que no aparecían eran patatas… mezcla de frutos secos, con su maíz, cachuetes, almendras…  La solución no parece de pensar mucho, ¿no? Pues nada, ahora en los mismos tipos de envases, que siguen rotulados como patatas fritas aparecen nueces peladas, almendras peladas, pistachos… ¿Solamente lo detectamos nosotros? Venga ya, que no lo creo… pero los servicios provinciales hasta de disuaden de que hagas nada… qué menos que reexpedir a la industria y que etiqueten correctamente, ¿no? Y eso como cosa sencilla y apañada…

Otro y este es de traca porque la industria es gigante y vende en todos los hipermercados… y eso es a sabiendas y con alevosía… mezcla de vegetales con germinados… mucho rótulo de soja… pero no es soja… es germinado de judía mungo… si eso no es fraude… pero nada, que eso parece que le toca a consumo y si lo detecta salud pública no vale… guay, pues nada… tomad y comed…

Así están las cosas y para colmo nos llaman para “recomendarnos” que rompamos actas con alguna inmovilización, justificada y acorde a la normativa, pero es que claro estamos en período electoral o preelectoral (aunque no sé cuando no se estuvo en momento no electoral… creo que enganchan una con otra) y como que debe quedar mal que el señor delegado tenga que firmar una resolución ratificando una inmovilización o resolviendo una destrucción… también mi madre me recomienda cortarme el pelo y que no diga tantas veces mierda al cabo del día…  y mierda, no pienso cortarme el pelo ahora que ya me sale una trenza en condiciones…

martes, 20 de enero de 2015

Reaprendiendo pueblos

El coche que suelo llevar está chof, y aunque logramos poner la batería en marcha con unas pinzas, con el finde y el frío, el coche ayer no quiso arrancar.  Y ninguno de los compañeros llevaba pinzas para tratar de arrancarlo (nota mental 1, mandar mensaje a papá para que si encuentra unas baratas en sus excursiones al Lidl me compre unas para dejarlas en el curro).

Hoy me he tenido que ir con el tastarro de todoterreno en el que el suelo del copiloto es una piscina para duendes (no sé de dónde sale toda esa agua… supongo de algo que se va deshelando con el paso de la mañana)… no me gusta cogerlo porque gasta mucho y no iba a ir a ningún sitio por caminos y pedregales, pero era eso o los que atufan a tabaco… hoy, ni libre estaba el de la dirección resistida… ya hay dos que mañana necesitan buen paseo a las periferias para cargar batería.

Me he ido de inspección y observación de animales mordedores a un pueblo al que hacía seis años o más que no voy de inspección; a lo sumo a tomar muestras de aguas si me tocaba ese recorrido. Con esto de la re-re-redistribución, me ha tocado como límite mordoriano del poniente… Sé llegar a lo típico: piscina, fuente, ayuntamiento, consultorio médico y antiguo matadero cerrado hace casi ocho años (la de rompimientos de cabeza y madrugones que me llevó).

Como en ese ayuntamiento no son nada simpáticos ni agradables y siempre nos han tratado fatal, directa al consultorio a preguntar cómo llegar a un par de sitios. Uno de los que esperaban en la sala me ha hecho un circuito estupendo para ir de un sitio a otro y no liarme por calles empinadas y estrechas, algunas llenitas de hielo… y eso que hacía un sol estupendo…

Me toca conocer unos 30 sitios nuevos que nunca he visitado y reaprenderme otros tantos que hace años que no inspeccionaba, más los que ya llevaba anteriormente… los de hoy, uno genial con unas instalaciones estupendas en el que la próxima vez preguntaré si me dejan hacer fotos para mostrar lo que es un plato testigo y cómo conservarlo en condiciones, por ejemplo… otro, está en el límite entre el bien y el mal y el tercero, madrecita, cuánta razón llevaba mi compañera en sus inspecciones, desasosegante, desquiciante, caótico…

Regreso a Mordor y la calefacción ya está fría. Algunos compañeros con abrigo y otras con bufanda gigante a modo de chal o mantita… menos mal que he puesto a descongelar caldito para comer… ¿Realmente hace menos de diez días que volví de vacaciones? Parece como si hubiera pasado un siglo.

martes, 13 de enero de 2015

Con buen humor

Comenzamos año con reapertura de establecimientos que cerraron a lo largo del 2014… es el bucle infinito que siempre escribo… vuelta a contar las mismas cosas aunque sea a gente distinta… si al final será práctico eso que digo de grabarme las explicaciones y así no tener que gastar más voz… le doy al play y mientras lo oyen yo hago la inspección y ahorro tiempo y saliva…

Algunos son carne de cierre ya… hay locales malditos, que abran lo que abran, sea quien sea, no funcionan… pero bueno, a lo mejor llega alguno y consigue que eso funcione… aunque el año anterior y el anterior y el anterior hayan tenido hasta tres y cuatro arrendatarios…

Seguimos ajustándonos con eso de los nuevos censos… nos toca asumir un 40% más de trabajo por las plazas que han quedado vacías… como le decía a una amiga, he decidido que este año me lo tomo con buen humor… ¿de qué me sirve cabrearme o ir como puta por rastrojo si a mis jefes les importa una castaña? No voy a ir de acá para allá cual posesa… sin prisa pero sin pausa china-chana haré hasta donde llegue… hago mi faena (con buen humor), acabo mi faena (con buen humor) y me voy a casa agotada (con buen humor)…

Por otro lado, hay alguna empresa jeta, por no decir estafadora, que está acojonando a los de Mordor y alrededores con la historia de que hay que hacer OBLIGATORIAMENTE un curso de alérgenos para que Sanidad no les ponga una multa de 600 euros por persona que no tenga el certificado del curso… el cursito vale 400 en principio… a lo mejor he recibido 30 llamadas de gente rogándome que les deje un plazo antes de levantarles acta para sanción porque no pueden pagar el curso… Manda huevos que una comercial convenza a la gente y yo que me desgañito con el tema de manipuladores se rían en mi cara…Ya llamamos antes de Navidad a la empresa formadora, pero obviamente se descojonaron de nosotros… ahora estoy intentando hacerme con una de las cartas que envía para mandarla a los jefes… al menos para que lo sepan porque no creo que hagan nada de nada… cada cual es libre de hacer el curso que le salga de las narices, aunque en este caso, vayan bastante engañados… es el poder que se tiene frente a la ignorancia y lo de siempre, hacer caso al particular que me vende algo bonito frente a lo que te diga el vago funcionario de la administración que no tiene ni puta idea… con el tiempo que llevo dando caña con la historia del etiquetado, los alérgenos, el anisakis… Pues nada, a predicar en el desierto…

Pero de buen humor…

viernes, 2 de enero de 2015

Sin propósitos

Los propósitos y yo no congeniamos bien… me parece una tontuna plantearme que este año que viene tengo que mejorar mi inglés, quitarme algunos kilos o ser más simpática… es como proponerme pintar el ojo a diario o ponerme taconazos todos los días, me canso…

Si tengo tiempo y ganas ya me pondré pelis en versión original; cuando regrese a Mordor retomaré la elíptica, los partidos de padel y los paseos perrunos por el campo (ahora son paseos de parque en parque, avenidas y canal… pedazo paseos que se clava el peludo) aunque no volveré al gimnasio mientras siga la política de hacinar a los alumnos de tal manera que no puedes hacer la mitad de ejercicios de yoga sin meterle el pie en la nariz al vecino… lo que me fastidia, tras doce años de clase, pero para eso, lo hago en casa… Lo de ser simpática es imposible… soy así…cara seria de normal y de avinagrada total cuando me mosqueo… la de cabreo la imagino como la de una asesina en serie (no me la he visto porque ¿quién estando cabreado se mira a un espejo?)… no voy a empezar a estas alturas de la vida a tratar de sonreír porque sí, como una tonta o hacer gracietas o decir más tonterías de las que ya digo. Asumí hace mucho que no soy la alegría de la huerta, la más majica de cara o la más cariñosa y chistosa… soy como soy y cada vez me siento más a gusto con ello…un poco “Sheldoniana” y un bastante estorbada…

No tengo propósitos para el 2015, solamente sueños, como siempre… sueños de volver a casa, de dormir a garrón suelto todas las noches del año, de por fin acabar alguna de mis historietas/noveluchas/patochadas, sueños de un trabajo motivador que me haga esforzarme para mejorar día a día… sencillo y complicado a la par.

Aunque sí tengo deseos para la gente que quiero, salud para todos, trabajo para quien lo necesite- comenzando por mi hermana-, unas cuantas risas para todos y jabón en los puntos de agua de los establecimientos e industrias alimentarias…

Nos vemos, nos leemos y si eso, nos meileamos… en Mordor o en Zaragoza seré esa que va siempre a cuestas con un libro, un chucho grande al que llamo pequeño y con mi chico de siempre hablando de todo y nada.

Feliz año