miércoles, 26 de septiembre de 2012

¿En serio esto es un curso?

Para un curso que me dan, siento que me están tomando el pelo… triste, triste el nivel al que hemos llegado… lo llego a saber y no vengo.

De los cuatro ponentes del día, la única que se ha salvado, la primera… y más que nada porque daba información curiosa sobre aspectos de la alimentación en los niños (la percepción que tienen, el consumo de verduras o frutas…)

Los de la tarde penosos… malas copias de otro curso usando material copiado de un gran ponente… pero de información nada de nada… de verdad, que para eso muchos tenemos más nivel para dar la charleta que nos han largado (y sí, creo que hasta yo sería capaz)

Si con la crisis no puedes traer a formadores que sepan transmitir y que sepan más que los asistentes o a personas que no digan “los terpenos y esta gente” o “eso es de guarripeich” que no lo hagan… de verdad, que tener a una veintena de personas de curso debe costar un disparate… para eso que organicen uno o dos cursos en condiciones y listo, nos jorobaremos sin poderlo hacer pero a los que seleccionen, recibirán un curso de formación bueno… y no esta castaña que o mucho cambia mañana o me voy a ir igual que vine…

… Salvo la gran frase del día “entre parar y correr existe una cosa que se llama andar”… Me ha molado… qué le vamos a hacer… estoy de curso coñón y me fijo en estas tontadas…

martes, 18 de septiembre de 2012

De narices

No hay cosa más complicada de describir en una inspección que el olor… y sin embargo da mucha información sobre un establecimiento alimentario… pero no todos tenemos la misma capacidad olfativa ni la misma “sensación olorosa” y mucho menos una capacidad de descripción tal que el que lea tu inspección pueda rememorar un olor parecido, hacerse a la idea y sacar conclusiones.

Olores a rancio, a cerrado, a algo aceitoso, a moho, a harina, a podrido, a humedad, a corrompido, a amoniaco, a carnuza, a tripas de pescado, a alcantarilla, a huevos podridos, a agua sucia, a humo, a motor, a pis de gato… ¿cómo los valoras? ¿qué información puedes mostrar solamente con esas indicaciones?

El otro día me hacía gracia que un compañero describía el olor a rancio que salía del desagüe del suelo de la cocina, del que te puedes hacer una idea si todo lo que precede es suciedad y más suciedad (a mí no me costaba nada pensar que debajo de esa rejilla había un costrazo de restos orgánicos de la porra por encima del sifón- si es que éste existía) pero después decía que ese olor se añadía al general de todo el establecimiento… ¿qué es el olor general? ¿Todo olía fatal? ¿Cuál debería ser el olor general de una cocina?

A mí me pasa con una cámara de una carnicería… entro y me pica la nariz con un olor amoniacal mezclado con carnuza… ¿cómo lo cuento? ¿indico que lloro cuando llevo un minuto dentro? Por más que buscaba restos podridos, no era capaz de detectar el origen del olor porque el olor se me había “metido” tanto que no me podía guiar por él y con la vista no alcancé a ver… puede ser del tubo de desagüe del aparato de frío, de restos de detrás de las estanterías, de algún cacho podrido que no logro ver… en la próxima inspección tengo que pertrecharme de una linterna y buscar mejor…

Hay veces, que si vas acompañado, uno no huele lo que huele el otro… yo hay veces que empiezo a arrugar la nariz y busco (cual chucho)… normalmente voy a tiro hecho con los desagües y más de una vez el capuchón del boli sirve para rascar entre los agujeros de la rejilla o el boli entero para levantar la rejilla… (si puedo jamás los toco porque me dan ascazo después de algunas experiencias mataderiles)… y mientras, mi compañera (me suele pasar casi siempre con ella) me mira como si estuviera chalada (que vale, lo estoy, pero no viene al caso) porque no huele nada… lo que para ella es una suerte cuando te toca en gracia un tipo de esos que se capuzan el Barón Dandy sin ducharse en una semana (que los hay, con sus cercos amarillos en los sobacos como los anillos de un tronco y el cuello de la camisa marronáceo)… pero que por otra parte, me parece que pierde mucha información que puedes captar a través del olfato...

No es que tengamos que ir todos con la nariz al viento husmeando pero sí debemos aprender a guiarnos e intentar sacar información de la cantidad de olores distintos que detectamos en una inspección.

¡Qué ustedes lo huelan bien!

domingo, 16 de septiembre de 2012

Conchito y Marirramona

Para los que no ven Antena Aragón y su programa Oregón Televisión, dejo aquí unos momentos tronchantes de Marirramona y Conchito, es decir, Marisol Aznar y Jorge Asín. He comprado entradas para su función “Tiempos Modorros”  del sábado aprovechando que vamos a Zaragoza… joer cómo se nota el IVA de los güevos…

Es domingo y más nos vale echarnos unas risas y no leer las burradas de las noticias…

sábado, 15 de septiembre de 2012

Retrocediendo a zancadas

Organizamos un viaje a un pueblo junto a una autovía; íbamos dos, con la idea de hacer un par de inspecciones en las áreas de servicio (una cada uno) y luego en el pueblo hacer una par de inspecciones cada uno a algún pequeño comercio… como siempre del dicho al hecho…

Mientras conducía, mi compañero me comentaba un poco el sitio que iba a inspeccionar, y al final, más que nada para agilizar la inspección (por eso de dos pares de ojos ven más) me ofrecí para acompañarlo y así hacíamos las inspecciones grandes juntos… Menos mal, porque si esa cocina le toca inspeccionarla a uno solo, le hubiera ocupado toda la jornada.

Para qué contar… una cocina en la que cabe tres o cuatro veces todo mi piso y dos trabajadores. Todo lo pendiente para fregar de la noche y de lo que llevaba por la mañana en unos carros llenos de moscas. Paredes, mesas, estantes, cajones… una costra de grasa… a mí eso de que escurra a lo largo de los azulejos por debajo de “lo que se ve” me deja muy claro que solamente se medio limpia lo cómodo, hasta donde llega mi mano sin estirarme ni agacharme. También es cierto que todas las cocinas que se montaron por la misma época tienen las mismas deficiencias de diseño, con huecos que no hay manera de limpiar salvo que desmontes las mesas y muevas maquinaria.

El propietario no nos montó un pollo, yo creo que porque era obvio que no cabía excusa. Me daba la sensación de que hacía semanas que no entraba por la cocina y conforme nos acompañaba, la cara se le iba transformando. Decía que este verano, salvo en algunos momentos concretos, la cosa había estado bastante floja (aunque cuando estábamos allí pararon al menos dos autobuses con guiris) y que no había metido personal extra ni para cocina ni para limpieza. De hecho al personal de limpieza les había quitado horas.

La verdad es que este verano, casi todos los establecimientos que inspeccionamos en las autovías y en carreteras concurridas están parecidos; menos personal, aunque con más horas, pero limpiar una cocina ocupa las mismas cocines cien o quinientos menús… y como siempre se ha optado por limpiar lo que el cliente ve y dejar para otro momento lo demás.

Era tal la cantidad de notas que cada uno llevaba que decidimos generalizar las deficiencias y poner algunos ejemplos… a pesar de eso, el documento era extra largo.

Al final, tras esa inspección, cada uno hicimos una en unas tiendecitas del pueblo y el día no dio para más… y regresas con la sensación de que no has hecho nada de nada  y que si no estás dando la brasa, las cosas se relajan y de nuevo vuelves al punto de partida de hace nueve años…

A lo largo de este año veo que salvo contados lugares, cada día los establecimientos e industrias alimentarias retroceden en cuanto a sus condiciones de limpieza, estado de mantenimiento y manipulaciones… ¿Solamente tengo yo esta sensación?

miércoles, 12 de septiembre de 2012

La loca de los bichos

Ayer estuve en una casa de una” loca-de-los-animales”, hasta 60 perros dice que ha llegado a tener… cacerolas, ollas y platos en las aceras con agua y comida para alimentar a los gatos, migas empapadas en yo qué sé para alimentar a los pajaritos… un olor en la entrada de la casa que escocía los ojos…

No nos dejó entrar en la casa (yo tampoco dejaría entrar a unos que dicen ser veterinarios enviados por el ayuntamiento con motivo de una denuncia por moscas y malos olores) pero salió a la calle a contarnos mil historias de una mente más enmarañada que anciana…

Nos enseñó uno de los corrales al que se accedía desde la calle. Me imaginaba perros flacos, consumidos por los parásitos, rodeados de moscas y de mierda… pero no… estaban lustrosos, no se veían sucios ni malnutridos. Tenían cada uno su caseta, su agua, comida y una zona de tierra. No había heces ni demasiadas moscas. Claro que podían estar mejor pero está claro que alguien, además de la anciana, se ocupaba de atenderlos (espero que esa persona se ocupase también de la señora)

Sí, claro que los vecinos tienen razón. Este verano con el calor, debía oler a rayos y habría moscas por doquier. Si un perro en un patio en verano ya deja olor, 15 ó 20, ni te cuento… Por muy pequeño que sea el pueblo (4 habitantes en invierno), es lógico que la vecina que llega a pasar el verano no quiera tener esa panda de gatos en su acera y una veintena de perros justo pegados a su pared… yo sería la primera en estar protestando todo el día…

Estoy convencida de que esa señora se ocupaba más de los animales que de sí misma… y que más que llamar a los veterinarios, el ayuntamiento debería haber contactado con servicios sociales… Aunque si a esa señora le quitan los animales, dura dos telediarios… Ella cuida a los bichos y los bichos la “cuidan” a su manera.

Nuestro informe es sencillo, contestamos a lo que se nos pregunta y punto… hay unos 15 perros sin chip, sin vacunar, supuestamente sin desparasitar. Además de solucionar los aspectos anteriores, convendría realizar limpiezas más frecuentes en verano en los corrales, evitar la acumulación de maleza y de excrementos a fin de que no proliferen moscas, pulgas y otros insectos... No puedo opinar ni actuar, solamente informar de lo que veo…

Pero esa no es la solución al problema…  mientras sigamos siendo tan descerebrados abandonando perros en gasolineras y carreteras, tirando cachorros vivos al contenedor de basuras, colgando perros de un árbol, atándolos en una valla al sol sin comida ni bebida para que mueran sufriendo lo indecible… habrá una “loca-de-los-gatos” o de los perros a la que le dejen en la puerta animales medio muertos o se pase media vida por los caminos recogiéndolos y metiéndolos en su casa a pesar de las protestas (razonables) de los vecinos.

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lunes, 10 de septiembre de 2012

Los siempre olvidados

Hay elementos, superficies, equipamiento, instalaciones, maquinaria y utensilios olvidados sistemáticamente… uno no se acuerda de que deben mantenerse y mucho menos que deben limpiarse de vez en cuando.

Algunos no suponen un riesgo sanitario pero dicen mucho del cuidado y de la calidad del servicio como los restos pegados bajo los tableros de las mesas o bajo los asientos… y no, no voy reptando buscando el chicle pegado bajo la silla. Las bancadas y asientos tapizados, muy cómodos y hasta decorativos pero de vez en cuando una limpieza…Y ya no digo de los marcos de las ventanas, lámparas, apliques, objetos decorativos o estantes… el ver una capita de polvo hace que uno tienda a extrapolar a que la cocina va a ser parecida…

En la cocina veo que los siempre olvidados son los laterales de los armarios o bancadas… se limpia el frontal y a veces la parte de arriba pero no los lados. El interior del microondas siempre es una caja de sorpresas, al igual que los lavavajillas y lavavasos, a pesar de que lo ves cuando metes un plato dentro… pero es que son un coñazo de limpiar, ya lo sé…

Los enchufes negros y costrosos de aceite, los interruptores, ganchos o imanes donde se cuelgan cuchillos, cables de las máquinas, dispensador de papel y de jabón, taburetes o escalones para llegar a lo alto de los armarios, luces de emergencia, accionamientos de puertas y armarios refrigeradores, rejillas de ventilación, tubos del gas, ruedas de carritos, patas de las mesas, partes inferiores de la cortadora, del robot de cocina, de la sierra o de la tostadora…

Podría seguir con el catálogo pero creo que ya lo he dejado claro… Solamente un apunte más… los mandiles y trapos… en ocasiones son un asquito… los mandiles con costras resecas de a saber qué, que cogen y se ponen cuando entras por la cocina…y los trapos, que tan pronto los usas para coger algo caliente como para “limpiar” el cuchillo y acto seguido lo pasan por la tabla de corte o “secan” algún ingrediente y luego se limpian las manos o limpian el plato tras emplatar para ponerlo bonito… con el mismo trapo…

Si alguien cree que son exageraciones, me alegro por él… eso quiere decir que hay esperanza y que el grado de higiene es bueno… pero para mí es la inspección de cada día… sin exagerar y sin rebuscar…

viernes, 7 de septiembre de 2012

No salgo a protestar solamente por “mis” recortes…

… voy los viernes “de luto” por la administración, y no salgo a protestar por mis recortes, también por los tuyos, los suyos y los del que está ahora mismo cruzando la calle bajo tu ventana… así que no me miréis como a un bicho raro y uníos, que son cinco o diez puñeteros minutos, que ya los tengo más que recuperados de mi horario de trabajo… Desde luego somos una panda de comodones de la porra… así nos va y así nos dan…

Lamentablemente ya comienzan a cerrar los establecimientos que abrieron buscando una salida a la crisis en la hostelería o en pequeñas actividades de comercio minorista. Los pocos ahorros metidos en una inversión que no ha tenido suerte… Si así estamos y todavía no ha finalizado el verano, ¿qué será en el duro, oscuro y frío invierno? ¿Cuántos de los nuevos sitios sobrevivirán? Y, ¿cuántos de los viejos? Que en Mordor, el invierno es crudo de cojones…

Sin embargo, en algunos sitios me dicen que han visto crecer las ventas a lo bestia durante el verano y que creen que más o menos las mantendrán en invierno… también decían que ahora las personas mayores compran y gastan más porque o bien les hacen la compra a sus familiares en paro o bien los tienen todos los días a comer… Si es que muchos están retornando de las ciudades al pueblo.

Lo que estoy notando es que en algunos establecimientos, cuando voy de inspección, los inspeccionados buscan desahogarse… te cuentan cotilleos que personalmente me dan igual y que no voy a contar, salvo alguno a La Rubia que me haga especial gracia  y otros, te cuentan sus penas como si fueras su sicólogo… deben pensar, a ésta,  la forastera eterna… no lo va a rajar fuera de aquí y ya de paso descargo un poco… y otros directamente ponen a parir al de la competencia buscando que sueltes prenda para ver si están tan jodidos como ellos o te cuentan historias como pretendiendo que salgas con el acta en ristre para sancionar a su oposición o te apiades de ellos…

Aunque lo mejor, son los afines a los gobernantes que me dicen que me calle y no diga que no tengo gasolina, bolis o papel… que doy muy mala imagen a su partido… ¿Todavía no se han dado cuenta de que me la pela quién gobierne, que lo que me importa es dar el mismo trato de inspección en Mordor que a 45 Km de distancia?

miércoles, 5 de septiembre de 2012

Cosas del día a día

Parece que por fin vamos a tener algo de gasolina a partir del lunes… un respiro porque por fin vamos a poder inspeccionar lugares fuera de Mordor y dejar de estar “enjaulados” en el despacho buscando papeles e inspecciones que hacer sin agobiar al inspeccionado…

Jolín (uf, repámpanos), parece que les cuesta entender que cuando decimos que no tenemos combustible, es que no tenemos… ya flipé ayer cuando el jefe me dijo que negociara con las gasolineras cercanas… ¿bajo qué autoridad? ¿con qué permiso? Si siempre nos han dicho que las palabras se las lleva el viento, ¿por qué  no me dices esto por escrito? ¿quién coño soy yo para negociar temas económicos si ni siquiera puedo elegir el modelo de batas o botas para ir al matadero o un puñetero boli? Me niego. ¿Voy a la gasolinera y les digo que nos fíen, que a saber cuándo pagará la administración? Venga, gasolinero, enróllate que soy buena tía… pues un jamón, que negocien los de asuntos económicos que para pagar 2,30 euros de una toma de muestras, en teléfono y cartas han gastado el triple… ole, ole y ole la eficacia… será el procedimiento y lo que quieras pero así se van euritos que nos vendrían de perlas en bolis, pilas, batas, gasofa y si me apuras en hilo para remendar las batas, que están que dan penica (la próxima bobina a usar será un hilo naranja que compré para coger el doble de unas cortinas y que no creo que necesite… molarán las batas zurcidicas en naranja)

Entre las cosas del día, un lugar nuevo recién abierto que no han comunicado nada a nadie… vamos de inspección (acompañada porque estábamos un compa y yo tratando de hacer inspección a los puestos de la Feria del pueblo- solicitado por el ayuntamiento- y conviene ir dos por si acaso), entramos y al tratar de recopilar los datos, la que está trabajando es incapaz de decir la razón social, el nombre del titular ni nada de nada… es la primera vez que me pasa… así que le he dejado una hojita para que comuniquen los datos, pero no sé por qué me da que no lo van a hacer… hemos hecho la inspección, me he puesto hasta las botas de escribir deficiencias y huelo que serán de los que cuando les hagamos un par de inspecciones desaparecerán… Mañana llamaré al Ayuntamiento para que me digan los datos, si es que han solicitado licencia…

Para acabar el día, ya me han liado para un torneo de padel de chicas… si hasta esta tarde llevaba desde finales de junio sin jugar… si es que soy fácil de convencer… ahora solamente me falta picarme con las rivales el domingo y parecer Raikkonen (por lo de fría e indiferente) para ir a la par de mi competitiva pareja… menudas dos… Que conste que no somos de las que damos saltitos cuando hacemos un juego…

lunes, 3 de septiembre de 2012

Narices

Reconozco que soy de las que se quejan (claramente lo he demostrado en este blog). Cuando estudiaba prometía que no me volvería a quejar si aprobaba tal asignatura; con las opos, que no me quejaría del lugar que me tocase con tal de aprobar… y al final, olvidas todas esas promesas y te quejas…

También reconozco que soy bastante cobardica… me entran retortijones con cualquier cambio (y anda que no tenemos a diario rumores sobre reestructuraciones y cambios) y con cada tontería que se sale de mis potenciales opciones planteadas, me entran los nervios nerviosos (sí, lo sé, le doy demasiadas vueltas al coco). Que conste que como me cabreo conmigo misma por ser así, intento no solamente disimular sino enfrentarme a ello (con mejor o peor resultado).

Toda esta filosofada mental de un lunes por la tarde viene por los juegos paralímpicos… ¿y yo me quejo? ¿y yo creo que le echo un par de narices a la vida? Anda ya… Cualquiera de los participantes en cualquiera de las pruebas demuestra ser un aguerrido guerrero simplemente con el hecho de levantarse cada mañana de la cama… que compitan, y se superen día a día, y sean lo más independientes posible da idea de lo fuerte que puede ser la voluntad y el esfuerzo… Eso son narices y lo demás modorreces

Mucho último superviviente, mucho fulanito de la jungla…ja, ja y requeteja…  Una Teresa Perales o un Javier Hernández (por poner a unos maños)… ellos son los auténticos luchadores

… Y yo, cuando me agobio por tontunas, una auténtica gilipollas…