miércoles, 21 de marzo de 2012

El tenedor, algo más que un cubierto

Flipo, alucino y me sonrojo… que un niño de preescolar conozca un único significado de la palabra tenedor y la cante con escenografía en plan “soy una taza, una tetera, una cuchara…” me parece muy bien, pero que un almacenista no sepa algo más sobre el tenedor…

Sacadito de la web de la RAE:

tenedor, ra.

1. m. y f. Persona que tiene o posee algo, especialmente la que posee legítimamente alguna letra de cambio u otro valor endosable.

2. m. Instrumento de mesa en forma de horca, con dos o más púas y que sirve para comer alimentos sólidos.

Las veces en que se me cruza la idea de pedir trabajo en una empresa privada, me vienen a la cabeza los grandes almacenes distribuidores a los que les da igual si hay etiqueta o no o si a la sardina la etiquetan como anchoa… allí, en recepción de productos, comprobando que las etiquetas están completas y que corresponden con el producto suministrado… ¿a quién vamos a engañar? No pasaría ni el periodo de prueba por quisquillosa, rechazando productos y productos….

Luego todo son quejas, pero si aceptan una mercancía, que apechuguen con las consecuencias… desde luego los mindundis de sanidad no somos los culpables de que lo que reciben y aceptan esté etiquetado como los spam de los bancos o como las instrucciones de montaje de un chisme chino… o directamente vengan sin información… no somos responsables de las fábricas y no siempre logramos ver todo lo que querríamos y más cuando tratan de esconderlo…

Fíjese usted que ahora vamos a tener que retirar el producto que hemos suministrado por las tiendas y los bares, qué mala imagen de nuestra empresa, con la crisis que hay… si la culpa no es nuestra… ¿cómo que la culpa no es suya? ¿Quién tiene el producto en sus cámaras? ¿Quién lo distribuye? ¿Quién ha comprado el producto a la fábrica? Si no cumple sus estándares de calidad, ¿por qué lo venden? Coño, que no hablo de una triste tienda en un pueblo de 60 personas, que hablo de un complejo de almacenamiento con almacenes en varias provincias, con camionacos que me cruzo constantemente por la carretera y hasta camino de mi casa… No es posible que entre tanto empleado, hijos de dueño y asesores varios, no haya nadie que se responsabilice del control de las mercancías…

Mientras se piensan que estas cosas no van con ellos, que tanto da vender tornillos como alimentos, y despotrican contra los “joputas” de sanidad, nos tocará hacer inmovilizaciones… Y aseguro que a mí me resultan ya pesadas, no por el trabajo y el cansancio mental entre escribir actas y aguantar la chapa que te sueltan, es que haré treinta en el mismo sitio y seguirán sin querer entender que son ellos los que deberían actuar inicialmente no aceptando esa mercancía y que es su responsabilidad comprobar que su mercancía cumple con lo que debe cumplir, entre otras con las normas de etiquetado… Y ya no hablamos cuando se convierten en marquistas, que eso es de nivel avanzado, en ocasiones, grado avanzado de osadía…

5 comentarios:

  1. Alucino cuando leo estas cosas... si eres un almacén de alimentos tendrás que saber de alimentos o dedicate a otra cosa. Si eres una tintorería tendrás que conocer los símbolos de las etiquetas de ropa... Es lógico, no? Ya, Mordor no tiene lógica, y el resto del país?

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  2. Lidia, siento comunicarte que todo, todito, todo lo que cuenta ámbar pasa igual en el resto del país. Si un super vende productos mal etiquetados dirá que la culpa es del fabricante, si los productos a la venta están caducados, la culpa del proveedor que no les avisó que caducaban tan pronto, si los envases están estropeados, el transportista que los carga de cualquier forma, etc.
    No sé en otros, pero en este país, lo de echar la culpa al vecino parece deporte nacional.

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  3. El dia que a los inspectores les de por informar al publico del estado higienicosanitario de muchos establecimientos (restaurantes, carnicerias, mataderos, fabricas de conservas....)que estan abiertos, no son clandestinos, tienen varias actas con multitud de deficienciencias para que estuvieran cerrados y que han sido comunicadas a los superiores y que aun así siguen abiertos......no se lo que pasaria.

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  4. Uf chicas, realmente los que no tenemos ni idea de sanidad no llegamos a concebir que pasen esas cosas. Hasta que no encontré el blog de casualidad, no sabía ni que había veterinarios que se dedicaran a estas cosas y la verdad, nuestro desconocimiento ayuda a que no valoremos vuestro trabajo. No es peloteo ni mucho menos, es que soy consumidora... está claro que debemos ser más exigentes en nuestras compras o cuando consumimos en un restaurante. Es como lo de la marisquería esa que conté, me sentí humillada por el trato que nos dieron y ni se me ocurrió inicialmente pedir una hoja de reclamaciones. Ya he aprendido para la próxima.
    Lo que dice Pablo a lo mejor es un poco exagerado pero eso de obligarles a poner en la puerta la nota dada por sanidad o por colores estaría bien.
    Buen fin de semana.

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  5. Hola!! Llevo unos meses sin poder leerte. Ahora que tengo tiempo te seguiré leyendo y leeré tus post-anteriores.

    Yo sabía que un bar de mi pueblo había sido cerrado por sanidad varias veces. Lo gracioso es que la gente lo sabía porque todo el mundo comenta que cuando entras da asquete. Aún así la peña sigue yendo. Los inspectores me lo confirmaron y yo se lo comente aún amiga, aún asi mi amiga sigue yendo y ella misma reconoce que no esta limpio el local, ni las mesas,... A veces a pesar de saber las cosas en general las personas hacen oídos sordos, ya sean proveedores,fabricantes e incluso consumidores.

    El problema de todo esto es que hay gente que si que cumple con la ley y no es justo para ellos, que otros se la saltén y obtengan los mismo beneficios. Pero como esto es España........

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