martes, 31 de enero de 2012

Descontando minutos

Nos quedan menos de dos horas para emprender camino a Mordor… nos racionamos tanto los días de permiso que a finales de enero intentamos venirnos a Zaragoza, si el tiempo lo permite… es como la margarita, este año sí, este año no… y este año ha tocado sí. No hemos hecho nada especial; de hecho no he visto a nadie de la pandi, pero he estado con la familia (cual clan italiano) celebrando el cumple de la Mamma… y de chácharas interminables con una de mis hermanas (que hacía tiempo que no rajábamos tanto). Y parque… parque pequeño, parque grande, parque pequeño, parque grande… no querías perro, pues toma paseo… Que no me quejo de los paseos pero el Cierzo soplaba con ganas y mis guantes se han quedado durmiendo en Mordor.

No me cunde nada venir… mi madre se ha empeñado en que ya va siendo hora de que despeje mi habitación y me lleve lo que vale o considero que vale y tire lo demás… cajón que abro, cajón que mi madre vaciaría en la basura…

Por encontrar, he encontrado tesoros… historietas a medio escribir, letras y letras de canciones de mi adolescencia (hasta traducidas), partituras, cartas de amigos, felicitaciones navideñas y tarjetas de cumpleaños… hasta cartas a los Reyes Magos… dibujos currados, apuntes, mi primera nómina, fotos de la EGB… esas cosas no se tiran no? Una de las cosas más raras que he encontrado ha sido un “testamento” de una que fue mi “mejor” amiga (acabamos fatal y no hemos vuelto a hablarnos desde los 21 años). Estaba sin abrir… madre, qué de chorradas… pero me dejaba sus discos y sus cintas VHS, sus libros y los autógrafos de los Héroes del Silencio… qué bueno…

Tres bolsas para el contenedor azul y me quedan cajones, estantes y rincones varios que revisar (vamos, si tengo un par de cajas de impresoras a tope de papeles).

Hay cosas que me hace duelo tirar, aunque sé que no sirven ya de nada, por ejemplo los apuntes de la facultad, que me los curraba que daba gusto, con dibujos incluso… ahora mismo no sabría coger apuntes a esa velocidad con esa limpieza y esa letra… pero dudo mucho que me dé por repasar genética o agricultura… y algunos deben ser tan obsoletos como cuando mi padre me pasó apuntes suyos… La Rubia se ofrece a escanearlos pero me parece otra pérdida de tiempo…

Y ya no cuento de libros… qué sobados algunos… con lo que me costó comprarme algunos de ellos o lo pesada que fui para que mi abuelo, mi madre o mi padre me los comprara (lo reconozco, he sido una auténtica pelmaza para que alguien me comprase libros)… esos me los llevo, aunque si tengo hijos, sobrinos o un niño pase por casa, seguro que los miraría con cierto aire de repugnancia…

Lo que ya ha sido de traca ha sido encontrar cosas y cosas que no son mías (desde luego mi cuarto se ha convertido en el trastero de mis hermanas), o encontrar media tableta de chocolate de a saber cuándo que estoy segura de que no era mía entre instrucciones de chismes que no he tenido nunca.

A esta velocidad creo que necesito un par de años para despejar el cuarto… y unos cuantos cajones para guardar lo que quiero conservar… creo que necesitaré hacer una segunda vuelta…

miércoles, 25 de enero de 2012

¿Cuánto?

De vez en cuando vuelvo a mis filosofadas:

¿Cuánto tiempo necesita una industria para cambiar su etiquetado fraudulento? Pongamos un ejemplo real de una de las mayores empresas que tenemos, que elabora productos para una cadena de supermercados, en la que dicen usar un ingrediente que realmente no usan y no indican los aditivos (conservantes, colorantes, antioxidantes)… ¿Nueve meses son suficientes? A mí me lo parece… Pues por lo visto no… ¿Solución? Por mí una inmovilización a lo burro, primero por mentirosos y segundo por pasotas… cuando lo propones parece que a los jefes políticos les da un retortijón y se cagan… Está claro que con mis razonamientos y creencias nunca llegaré a tener un puesto de responsabilidad… ¡ay, cuanto tengo que des-aprender!

¿Cuántas inspecciones son necesarias para que una empresa limpie? Manda narices que me pregunte esto… se supone que una industria alimentaria tiene más que asumido que la limpieza es casi el primer mandamiento… Una inspección, dos, tres, cuatro, cinco… un año, dos años, tres años… A algunas le importa una mierda (que queda guay en el contexto) y siguen con os jueguecitos de cambiar las razones sociales por si se reclama el pago de las multas… que no es que quiera que les pongan multas, lo que quiero es que LIMPIEN, así con letras gordas… fuera costras negruzcas, fuera restos resecos, que muevan maquinaria y limpien por detrás, por debajo, por encima y por los lados… que limpien más allá de donde llega su mano…

Cuando haces una propuesta de cierre por esto, como que no cuela… no estará tan sucio como para cerrarles o paralizar la actividad… ya, pues ven tú y me lo cuentas… Con estas rendijitas de ojos que tengo y con el resto de mis sentidos, debería volverme como el de Johnny cogió su fusil para poder tener un puesto de responsabilidad… ¡ay, cuánto tengo que dejar de ver, oír, oler y sentir (gustar, no he llegado al extremo)!

¿Cuántas veces hay que repetir la misma letanía en un mismo establecimiento a una misma persona para que arregle, repare, ajuste…? Además de hablarlo, lo escribo y todavía tengo la letra legible esa que hacía que me pidieran los apuntes. Lo remarco, pongo flechas, cuadraditos… puedes decir que la carne esa debe estar a menos de 7ºC y dará igual las veces que lo digas, escribas, marques y remarques, que una inspección estará a 10, 11, 15, 21… y puede que sorprendentemente y casi por chiripa un día esté a 5… pero siguen sin querer entender (o al menos esa sensación me dan algunos)

Y luego algunos me dicen que soy una cabrona, hija de puta que les tengo manía… así, como lo escribo, me lo dicen de corrido…

¿Cuántas veces he deseado que haya una intoxicación alimentaria provocada en alguno de estos sitios? Si soy sincera, más de una. Luego pienso la cantidad de trabajo que eso me va a llevar (es así, es mi segundo pensamiento tras desearlo), al momento me siento una cabrona de verdad (y no como cuando me lo gritan) y me doy cuenta de que soy una mala persona porque los consumidores no tienen/tenemos la culpa… ya cuando me he fustigado mentalmente lo suficiente caigo en que a la que empapelarían sería a mí por no haber hecho bien mi trabajo.

¿Cuántas veces siento que somos incomprendidos, ninguneados, insultados injustamente? Demasiadas… y lo triste es que no siempre por los inspeccionados… y eso es lo que más me jode.

Oiga, y tan a gusto que me he quedado…

 

 

 

P.D. Valor, Señor del lado oscuro… todo túnel tiene su salida…

lunes, 23 de enero de 2012

Con el agua al cuello

Esta mañana me he ido muy temprano de casa. Iba bien pertrechada con mis calcetines gordos, mi forro polar y hasta un termo con té caliente. Me tocaba matadero y aunque hoy no hacía mucho frío (-1ºC), al haber humedad, a lo que te das cuenta, estás congelada.

No me esperaban y como siempre, tengo la sensación de ser la mala sorpresa de la mañana… y eso que no me porto mal con ellos y trato de hablar mientras faenan y no poner cara de seria… pero es que es mi cara de serie… plena relajación muscular, que le digo a mi madre, cuando me dice que tengo cara de seca… parece mentira que todavía no se hayan dado cuenta de cuál es mi cara de enfado.

Me había llevado faena para cuando parasen a almorzar, pero la he paseado sin más… ni tres horas de sacrificio y ya habíamos acabado. Vale que es la cuesta de enero, pero no fastidies, solamente dos entradores y poquísimos animales. Si casi cuesta más poner en marcha las instalaciones que lo que se saca de los animales. No me ha extrañado que uno de los matarifes me cuente que lleva desde septiembre sin cobrar. Con el agua al cuello deben estar y mal panorama pinta.

Como siempre que voy al matadero he acabado como Dexter jugando con su escalpelo y los pantalones chipiados… así que antes de volver al despacho, me he ido directa a tomar un cafecito caliente… ni diez clientes… si es que no hay movimiento…

Pensaba pasarme la mañana en el matadero, y desde luego mona hoy no iba… pues toma, el resto de la mañana de visitas, que si el gerente de una empresa con sus líos de etiquetado, que además contaba que iba a reducir la jornada al menos a tres de los empleados porque este año habían facturado 900.000 € menos que el anterior y que no podía ser, que ya habían despedido a seis o siete… Mal vamos, porque esa gente aún reducirá más sus compras, las tiendas venden menos y prescinden de más gente,  la empresa moverá menos mercancía a tiendas y bares y al final es un círculo que nos empobrece más y más (ya, mis teorías económicas son de niño de parvulitos)

Luego una pareja de lo más pintoresco (qué malas fueron las drogas durante la ruta del bakalao) que ha venido a jugar a las casitas y enterarse de la normativa y del equipamiento para montar un bar con una cocina sencillita. Conforme íbamos hablando de lo que necesitaban veía en sus caras que se iban relajando poquito a poco porque alguien les había contado que pedíamos a saber qué pero carísimo y mi perorata ha consistido en buscad de segunda mano y pongáis lo que pongáis pensad en que luego hay que limpiar, con lo cual, lo más sencillito y rápido de limpiar y conforme hablaban me iban dando mejor rollo… según como se lo monten, en cuanto al trato y si cocinan rico, pueden sacarse un sueldillo decente… aunque para eso, se hayan tenido que ir a la Conchinchina (está lejos hasta de Mordor).

Menudo lunes… si estoy como si fuera jueves… hoy como las niñas buenas (que lo soy, de verdad)  me iré a dormir a la hora de los Lunnis (¿existen todavía?), aunque yo soy de la época de Casimiro (uf, qué mayor me estoy haciendo)

sábado, 21 de enero de 2012

Fin de semana

Comienzo el año agotada… a eso de las cuatro y pico, cuando todavía estoy comiendo me entra un cansancio, que como me siente, me quedo frita casi media hora… yo creo que es que desde mis cuatro galletas y el vaso de leche antes de las siete de la mañana hasta las cuatro, hora a la que comemos, pasan demasiadas horas y mis reservas de energía caen estrepitosamente… comer algo a media mañana lo solucionaría, ya, pero no tengo costumbre y se me olvida coger aunque sea un par de mandarinas de casa…

Tampoco es que a las seis y pico esté muy despierta… me he rebanado un poco un dedo cortando chorizo para los macarrones… claro, que tampoco mis terminaciones sensitivas estaban muy despiertas y el agua fría ayudó a dormirlas más… pero a las doce de la mañana, me palpitaba el pulgar… no es un corte grave ni mucho menos, pero el colgajo se quedó allí medio suelto y me he ido enganchando por todo hasta que por fin, cual caníbal le he he dado un mordisco y tirado a la basura…uf, qué gore suena!!!!

Con esto de la nieve, la lluvia, el hielo… y el perro, La Rubia decía que el suelo de casa sonaba como si fueras pisando Krispies… da igual las veces que pases el cepillo, las veces que friegues o pases el aspirador, siempre hay algún pelo por el suelo o tierra… No se puede tener perfecta la casa con un perro por medio y menos mal que se le ha pasado su virus porque era un grifo de esputos continuo… sigo con mi vena guarrindonga…

En cuanto al curro, como siempre, siendo la mala esa que levanta actas para algunas, la pesada de las temperaturas para otros, la friki que se sabe los artículos de las normas (lo soltó un compañero el otro día tomando un café y es un tanto exagerado, aunque es verdad que me sigo sabiendo parrafadas literales de normas alimentarias, pero al igual que gasto memoria en diálogos de los cuentos que me contaba mi madre y mi abuela de pequeña- soy una experta en la ratita presumida, en caperucita roja y en los siete cabritillos, voces incluidas).

Para variar, como todas las semanas, discutiendo con algún ayuntamiento… no entiendo lo de mentir en los registros, si el cloro es 0, es 0… Otra cosa de la que no quieren enterarse es de las licencias municipales, que con la famosa ley Omnibus se han agilizado, pero para según qué, siguen perdiendo el tiempo solicitando informes no necesarios ni vinculantes sobre aspectos desfasados para demorar su puesta en marcha… estoy harta de devolverles tochos de proyectos que cuentan los perfiles de las viguetas y las no sé qué de las no se cuantas que nada tienen que ver con mi trabajo… cuando el sitio se ponga en marcha, ya os haré un informe sanitario si lo queréis y si entra dentro de mi ámbito de trabajo, que esa es otra.

Lo ideal sería que los que van a poner ese negocio, si es alimentario, al menos consultaran con los de sanidad para que no se dejen de poner alguna cosa necesaria, como los lavamanos que suelen olvidarse y luego, ah, es que no tengo cerca un desagüe… sigo alucinando con las ideas de algunos arquitectos e ingenieros, que dejarán un sitio bonito pero horrible desde el punto de vista de la seguridad alimentaria… si a nosotros lo de “jugar a las casitas” nos mola…

Buen finde… espero terminarme un libro que parecía otra cosa, la idea es buena pero lo adornan demasiado con rollos sentimentales-físico-sexuales que ya parece una novela moñas y no le pega… Creo que me confundí de trabajo, debería currar en una editorial leyendo sin parar y obligando a reescribir diálogos absurdos y frases rimbombantes… uf, creo que sería despiadada y temible… y no la hermanita de la Caridad que estoy hecha…

martes, 17 de enero de 2012

Chipichape

Eso es lo que dice La Rubia cuando todo está lleno de chacos: ¡Menudo chipichape! y vas andando como si Flo hiciera una imitación de Chuachenager caminando… Nada, que la nieve se quedó en una capa de hielo que ha dado para resbalones y patinazos.

Esta mañana he estado en un sitio nuevo de un cansino… habla, habla y habla y te das cuenta de que no quiere escucharte, que va a su bola… seguro que en la segunda inspección me dice que no recuerda que le comentase nada… Que conste que me doy cuenta de esas cosas y trato de dejar todo escrito con letra clara y explicaciones sencillas pero completas. Pero vamos, que ya sé distinguir los que hablan sin parar por los nervios a los que hablan sin parar para no entrar al tema. Además era de estos que se pasa el rato llamándote por tu nombre, Fulanita esto, Fulanita aquello y que son capaces de decir tu nombre dos veces en una misma frase… En la hora y pico que he estado (no por ganas sino porque me ha contado hasta la vida de su mujer) me he dado cuenta de que trata a la gente como si la conociera de siempre y les hace “gracietas” que no son tales… no puedes decirle a una mujer octogenaria “¡Qué pasa, belleza!” o cosas así… y más cuando vas a un pueblo que no te conoce nadie y pretendes montar un negocio en un terreno casi vedado a los forasteros… se puede ser borrico, pero no faltón… al menos eso creo.

Después he ido a otro sito que ha pasado del negro- de suciedad- a la blancura- de limpieza… nuestro esfuerzo nos ha costado y menos mal que la mujer del dueño tomó cartas en el asunto. La gracia es que él no se acuerda de mí, aunque sí de mis actas, y cree que se las levantó otra chica que se ha ido… ¿será que por entonces llevaba otro color de pelo (época de autotinción y color indefinido)? Yo no le quito la idea… que ahora ya no se pone rojo ni me chilla cagándose en mi madre y pisoteando tumbas de mi familia. Si antes ir allí suponía escribir y describir grasa, suciedad, roturas, costras negras, temperaturas veraniegas en las neveras… ahora son cuatro tontadas… y qué ganas y qué gusto da poder poner en una inspección que la cortadora no tiene restos resecos, que el interior del microondas está limpio, que no hay nada por el suelo, que no hay grasa en las paredes, que las temperaturas están bie… si no pongo estas cosas parece que no hay inspección y además, a ella, que ahora está en la cocina, le debe resultar agradable que alguien valore el trabajo y esfuerzo que hace por limpiar y tenerlo todo en orden, por mucho que diga que le he pillado con una nevera con hielo… joer, ojalá me encontrase eso en otros sitios… me pondría a bailar…

Voy a intentar sudar un rato… aunque con este frío…

lunes, 16 de enero de 2012

Lunes de nieve

Anoche pensábamos que iba a caer una buena nevada… sin embargo al levantarnos, caían chuzos a pesar de que hacía mucho frío. Me tocaban muestras bastante lejos, y todo el camino, el coche avisaba de riesgo de hielo… caían copines chiquitos entre las gotas de lluvia, pero nada más… Ida y vuelta sin grandes complicaciones (salvo encontrar algunas de las cosas “raras” que nos habían solicitado muestrear).

Nuestro meteorólogo personal había vaticinado que empezaría a nevar sobre las cinco y pico… casi… una hora antes y a pesar del agua caída, empieza a cuajar la nieve… por la tele ya he visto que las carreteras que suelo usar están imposibles, pero como no voy a ir a casa hasta dentro de un montón, que nieve, que nieve… dos palmos, si quiere… así los paseos con el perro serán más divertidos… aunque de camino al trabajo parezcamos patos borrachos- recuerdo hace un par de años en que La Rubia y yo nos íbamos agarrando a una verja porque había hielo y nos cruzamos con una polaca, de estas altas, rubias y guapas que iba tan campante caminando con unos zapatos con tacón casi de aguja…

Volviendo al trabajo… Llama un señor quejándose de unas bolsas de snacks caducadas y pide que vayamos a cerrar la tienda. Le preguntas si ha puesto una hoja de reclamaciones, si por un casual tiene ticket… y te acaba contando su vida y la de su ex, desvariando un poco con la historia de las chuches que su hijo compró y que si se pone malo, su ex lo denunciará y la culpa la tiene esa tienda por vender productos en mal estado. Ya de paso, que si uno puede enfermar por el agua porque como la red de abastecimiento del pueblo llega a una granja, miré usted, los virus y las bacterias pueden llegar al grifo de mi casa y claro, si el fin de semana mi hijo viene a verme y bebe agua y enferma, mi ex, me denunciará.

Una de mis compañeras se descojonaba  mientras yo le contaba al señor que no voy cerrando tiendas por vender productos caducados, que pidiera la hoja de reclamaciones y que si no se la daba o bien viniese por el despacho o que fuera al ayuntamiento si se le hacía complicado escribir para denunciar… que no se preocupara por el niño, que los snacks tienen fecha de consumo preferente, y que si solamente habían pasado unos días desde la fecha no era probable que pasase nada, pero que sí tenía razón en que no estaba bien que la tienda vendiera esos productos. Que en cuanto al agua, que la red tenía sistemas para evitar retrocesos, por lo que sería raro que le llegasen bacterias de la granja a su grifo, pero, que cabía la posibilidad de que hubiera fallos en la desinfección del agua… y bla, y bla… Casi media hora y lo que he conseguido es que el señor quiera venir a conocerme y “contarme otras cosas interesantes del pueblo porque veo que me puedes ayudar” (palabras textuales)… Miedito me da…

A otra le hemos dado la razón cuando dice que va a denunciar a uno por vender en un puesto ambulante congelados que los ha sacado del camión y los tiene expuestos en la calle ya que pierden la cadena de frío. Me parece estupendo y le animo a ello porque el Ayuntamiento, que tiene la competencia, parece que no tiene el menor interés en que le ayudemos a la inspección del mercadillo ya que lo que necesita es que vengan más y más puestos y recaudar más y más por dejarles exponer sus productos. Si el municipal ha ido a recaudar, dudo mucho que se preste a hacerle desalojar… y si vamos nosotros y levantamos acta, espantaremos a algunos y claro, es perder pasta municipal. Aunque parece inexplicable, si el Ayuntamiento no quiere, no podemos inspeccionar a los ambulantes por más que se lo digamos, nos ofrezcamos o lo que sea… de hecho, si vemos cosas que ya son de traca, llegamos a denunciar a la guardia civil a título personal o montamos pollo en el Ayuntamiento hasta que se dignan a hacer algo… ole con la sanidad a nivel municipal…

Sigue nevando… parecía que acababa pero los copos son cada vez más gordos… las aceras ya están blancas y en la calzada se notan las rodadas de los coches… después del paseo con el perro va a ser tarde de sofá y libro…

viernes, 13 de enero de 2012

¿Qué ha pasado con las pastelerías?

Hace ya un porrón comenté sobre las panaderías, en las que el pan ya ni lo hacían, bien porque lo traían desde una panificadora industrial o directamente eran masas precocidas congeladas…

Ahora son las pastelerías… qué pena, de verdad… el lunes tengo muestras que recoger y no hay lugares en los que pueda tomar lo que se nos solicita – primero, porque es lunes y manda narices que te pidan pasteles un lunes y segundo, porque ya no hacen apenas…

Ya aviso que hoy voy a poner fotos para hacer la boca agua…

Los que hacen, o bien hacen un montón un día y congelan o lo hacen por encargo (obviamente porque no está la historia para tirar nada)

Lo del encargo, cuando no estás en una ciudad, lo veo normal… lo de congelar, no me mola nada porque al menos, los pocos pasteleros que nos quedan, usan congeladores cutre-salchicheros que tardan horas en congelar y eso se resiente en la calidad… además es costumbre que luego los vendan semi o descongelados y no siempre avisan de ello y algunos en su casa, después, recongelan los restos sin saber…

Por otra parte, estos mismos, venden a otros establecimientos, que a su vez recongelan en muchas ocasiones, y siendo sensatos, en ocasiones, dejan de saber cuándo congelaron o cuándo descongelaron (como siempre, no todo esto es aplicable a todo el mundo)

 

Ahora ya, ni en los sitios que hacían tartas de bodas, son elaboradores propiamente dichos… algunos compran a nivel industrial algunas piezas (cual puzzle) y adornos dulces.

Si llevo fatal (para mi consumo) que cruasanes y bollos, napolitanas rellenas de chocolate, palmeras de chocolate, brevas… etc., etc., provengan prácticamente de masas congeladas… mi desgracia, desconcierto, tristeza y disgusto es que hasta los pasteles sean congelados y provengan de una fábrica… todo en serie y a nivel industrial… todos iguales (yo que de pequeña casi medía todos los pasteles de chocolate para coger, obviamente, el más grande o el que más capa de chocolate llevase)

Vale que es una ayuda todas las preparaciones, jarabes, mixes, coberturas y esas cosas, que son más rápidos y ahorran tiempo y supongo que dinero, pero, las natas ya no son natas, la mermelada ya no es mermelada, el azúcar no es tal sino que viene en un bidón en forma de glucosa, fructosa o vete a veces a saber qué mezclas lleva… y seamos sinceros, ni el chocolate sabe como el de hace unos años.

Que conste que algunos son preciosos (como siempre tiro de mi tierra)

Pero para esto, como que me gusta lo tradicional

No es de extrañar que algunos acaben experimentando sus propias tartas… si tuviera una Thermomix… por eso no la tengo… creo que he capturado la foto de la tarta de mi hermana Mery de chocolate y cocacola (al menos ese color de mesa de cocina y ese plato me suena)

Al menos nos hemos endulzado visualmente… buen finde

miércoles, 11 de enero de 2012

Frikileando

Llevo un par de días con un libro que cuenta los brotes y estudios de los filovirus… que así no suena a nada apetecible ni fantástico pero si decimos Ébola, nos recuerda a pelis tipo “Estallido”… sigue sonando poco apetecible pero resulta la mar de entretenido leer lo que cuenta la gente que se ponía los trajes de tipo astronauta y de repente se encontraban un agujerito en el guante y les entraba un canguelo de la muerte o de cómo intentaban buscar el origen de la infección en una cueva perdida del antiguo Zaire. Vale, acepto que soy algo friki, aunque desde luego no me gustaría nada toparme con este bicho ni con sus amigotes Marburgo y demás.

En el mundo friki en el que últimamente parece que estoy metida hasta las orejas, hoy me he topado con uno de esos seres que hace todo lo posible para comportarse como un animal cuando vas de inspección donde trabaja como cocinero jefe. Le he visto y le he saludado mientras me acompañaba el gerente. “Ya se me ha jodido el año con verte” o algo así ha dicho a mi saludo. La verdad es que ya como si oigo llover… y a veces, hasta se me escapa una sonrisa (discreta, que conste).

En la hora y pico que he estado por allí (es una cocina que requiere eso y más tiempo) ha mandado a tomar viento a un proveedor, ha tirado al suelo una sartén cuando se ha enfadado con una de las cocineras, ha aventado un dispensador de jabón cuando he dicho que estaba sucio y grasiento, además de vacío… si yo estaba en la cámara de congelación, él se ponía a despotricar junto a la puerta, si me iba al almacén, el otro iba por el pasillo como si fuera en un desfile militar.

El gerente abochornado, sin saber dónde meterse ni qué decirme ya para disculparse… el otro, bobo (porque no tiene otro calificativo) haciendo de Krusty, el payaso, el resto del personal de cocina recogiendo lo del otro y siendo casi peloteros conmigo.

Y yo, ¿qué hago? ¿Me parto de risa, me cabreo, me lo tomo a la tremenda, paso? Opto por hacer mi inspección indicando las correcciones que veo de otras inspecciones y las que siguen abiertas y las nuevas que veo… claro que luego, hago un especial sobre el susodicho con su nombre y apellidos, indicando las deficiencias sobre manipulaciones que le he visto (obviamente pasando de sus comentarios soeces y provocadores)… No con ánimo de multar al sitio, que no estaba tan mal y habían hecho cositas, no… he indicado que se recomienda que este sujeto realice un curso de perfeccionamiento o de reciclaje sobre las manipulaciones higiénicas en una cocina dado que se observan prácticas que pueden suponer un riesgo sanitario y que mientras tanto haya una persona que lo supervise (a mí me jodería leer eso)

El tipo pasando, el gerente diciendo que seguro que el otro se niega a hacer un curso o cualquier otra cosa que venga tanto de él como de mí… Que por favor, si puede ser que haga las inspecciones en lunes o martes que son los días en los que el cocinero libra. Siendo sincera y avisando por última vez, le he dicho que la próxima es un acta para sanción y no por lo que me diga o los gestos que me haga, sino por lo que veo en sus manipulaciones (desde fumar en la cocina a usar alimentos con claros indicios de podredumbre pasando por recoger restos del suelo y ponerlos de nuevo en la sartén)… al menos, esta mañana había alguien despierto y al tanto para tirar las cosas podridillas de las mesas de trabajo y tirar el contenido de la sartén… Me he quedado con la duda de si, ¿cuando no estoy yo, alguien va detrás de Krusty haciendo eso, o solamente lo han hecho porque estaba delante? Lo de no ir de inspección los días que trabaja es ya de remate… pienso ir cuando esté y estar un buen rato viendo cómo trabaja…

Obviamente no puedo ir a comer allí porque sé que me escupirá en la comida… y como que pensar en que puede haber en mi plato algo que en su momento estuvo un poco verdoso o con pelitos o blandurrio, como que no…  al menos la zona de cafetería está controlada por un gran camarero que quizás pelotea un poco pero al que agradezco el trato cuando voy de cliente.

Si yo soy friki, este cocinero no sé ni cómo definirlo pero qué a gusto le daría una patada en el trasero. Debe cocinar rico porque no me explico que le soporten sus majaderías, aunque viendo cómo han bajado el volumen de comidas, creo que no todo se puede achacar a la crisis.

martes, 10 de enero de 2012

De vuelta al cole

Solamente cuatro días “reales” de permiso y al regreso tocan unos cuantos cambios… el primero, el cambio de horario…37,5 horas a la semana… por ahora todavía no han publicado la nueva regulación de la jornada, con lo cual, nadie sabe si tenemos que hacer media hora más por la mañana o currar por las tardes… por ahora madrugo más y como más tarde (mis tripas rugen cual león)… que conste que no me importa, que comencé mi vida laboral trabajando a destajo cobrando por muestra analizada y no por hora trabajada, con lo cual, para tener un triste sueldo curraba más de 50 horas a la semana, sábados y domingos incluidos…

Lo que pasa es que uno enseguida se acostumbra a lo bueno, pasa a las 40 horas a la semana, luego a las 37,5 y llega a las 35… y “fastidia”… la verdad es que no me causa un trauma porque sigo siendo de esas tontas que se lleva trabajo a casa, lecturas, informes y demás y ahora los haré en el curro… el gran problemón lo tienen los que apenas cubren 30 horas desde que entran por el despacho hasta que salen, que canta un disparate… porque seamos realistas y sinceros, el trayecto desde tu casa y el de regreso no cuenta, si no, ya me iría a Zaragoza y entre ida y vuelta haría horas extras todos los días y obviamente currar, no haría ni una O con un canuto…

El otro cambio es el de los establecimientos asignados… solamente con ver los expedientes, y en algunos, su falta de historial, me da casi miedo. Es una gran mentira eso de “quien parte y reparte…”, sí, soy una idiota… pero ¿cómo le voy a endosar un marrón al novato? que lleva un año y todavía está de rodaje y hay que ir diciéndole las cosas (coge acta, coge boli, coge un termómetro, no- eso no lo dice la norma, este acta está mal escrita, pon la razón social en razón social, no-esa no es la carretera- te has ido en dirección contraria…) y luego hay que ir a “rescatarlo” cuando hay que redactar un acta con vista a expediente o hacer una inmovilización…o ¿cómo se lo paso a la que siempre pasa de hacer nada comprometido o comprometerse? Si  le das un sitio con enjundia o en el que hay que molestarse en repasar normativa o ponerse al día en los procesos tecnológicos y la microbiología, podemos dar por archivado el lugar por los siglos de los siglos… Así que toma, por tonta, ¿no me gusta estudiar? Pues dos tazas…  Menos mal que hay un par más, tontos de los míos, con los que puedo repartir algunos de estos sitios (y la verdad, algunos son mil veces mejores que un bareto de puebler pedido (con todos mis respetos) porque aprendes un montón y ves cosas interesantes, pero eso lo debemos pensar los cuatro frikis de turno)

Mi madre me achaca que no me sé imponer, pero me cuesta concebir que hay personas con la edad de mis padres que se escaquean más que una adolescente para hacer cola para entrar a un concierto de Justin Bieber (madre mía, jamás pensé que iba a poner ese nombre en el blog… uf, uf, que me cuesta respirar)… soy de las que creen que a todos nos llega nuestro particular sanmartín… Sigo esperando que, cuando llegue a esos años, no me haya vuelto como ellos y si lo he hecho, que haya alguien que me suelte dos collejas, me mande a tomar por saco y me haga sonrojarme hasta que me quemen las orejas (y que yo tenga la decencia todavía de avergonzarme porque todavía tendré salvación).

Llevo 10 días sin cantar la canción de Los Fruitis… aunque llevo toda la mañanita con el “Querida Milagros”, que manda narices que me sepa y acuerde de la cancioncita (cosas de oírsela hasta la saciedad a una tía mía). En cuanto a los tacos y palabras malsonantes.. voy… poco a poco… salvo con “mierda”, cuya perfección a la hora de decirla hace que suene casi oliendo (a ver qué pone mi hermana sobre eso, jejeje)

miércoles, 4 de enero de 2012

Deshaciendo el mundo

Este año mi madre nos ha pedido contención en los regalos de Reyes y sobretodo que sean cosas útiles… siempre hemos sido de Reyes (tenemos Mamá Noel, que consiste en un detalle en el plato en la comida de Navidad: un libro, unos guantes, un gel en un frasco bonito…).

Como siempre, a última hora me toca ir de compras… en Mordor no hay mucho donde elegir y desde luego barato no es; cuando pienso en comprar todo por Internet, ya es tarde para que llegue con antelación suficiente y que si esto ya lo he comprado yo o esto otro que pensaba regalar se lo acaba de comprar… entre paseo y paseo de tiendas y paseo y paseo con el perro, estoy agotada.

Este año no hay nada rimbombante, así que hermana lectora ya sabes, te tocan regalos prácticos…(ya ha estado pululando por aquí para ver lo que escribía). Además con el sablazo de la revisión anual del coche me he quedado helada para el resto del día… parece una tontería pero han subido 20 euros la revisión… no es mucho pero desde luego mi sueldo como el de todos va a la baja y como que joroba que suban los precios…

Ayer estuvimos de noche de cervezas… teníamos que terminar con las “catas” que dejamos pendientes en Nochevieja… vale que había una botella de cocacola zero sin cafeína (que no sabe a nada y solamente son burbujas) para nuestra amiga que se trastorna con la cafeína que pretendía hacer un descanso entre estudio y estudio (lleva años con oposiciones de justicia y va ascendiendo en el escalafón a costa de estudiar y estudiar). Como siempre que si libros, que si películas, que si las clases del insti (una es profesora), que si las profesiones estas raras de coach que no hay manera de entender a qué se dedican, que si esta cerveza sabe a caramelo, que si esta otra es de un color rojo turbio, que menuda fuerza de voluntad tienes, tía, sentándote 10 horas al día ante los apuntes- ya, pero mi cabeza no es la de antes y a lo mejor aprovecho la mitad… y como no, el tema estrella, la economía y cómo vamos a llevar eso de ser de clase baja cuando creímos ser de clase media…

Les oía hablar que si de la prima de riesgo, que si la millonada que les habíamos soltado a los bancos al 1% de interés para que compren deuda que luego se les devuelve con el 6%, que si de los salarios medios, que si de los copagos, que si no hay políticos vocacionales, que si ahora los estados se consideran como una empresa y por tanto se busca incrementar los beneficios a costa de cargarse lo que ha costado años conseguir como la sanidad o la educación, que si de  blablablabla… una, profe de geografía e historia, La Rubia a la que le chifla la política y el otro que le gusta desmenuzar todo hasta el último detalle… opté por trago va, trago viene de cerveza…

Si la situación es sencilla… ayer, de los cinco, uno en paro desde hace un porrón de años… ayer, de la pandilla de mi hermana pequeña, todos en paro menos una trabajando sin contrato… que me cuenten las milongas que quieran pero esto no lo levanta ni dios…

Creo que volveré a mis historias de inspección que al menos dan para unas risas…