lunes, 10 de enero de 2011

Cómo nos dejamos engañar

Ayer por la noche zapeando encontré este documental en la 2…

documental emitido en la 2 el 09/01/2011

Todos sabemos que cuando compramos algo no nos va a durar para siempre (salvo la mesa que he comprado para el comedor que tiene que durar hasta mis nietos por lo menos).

De pequeños nos compraban ropa o la heredábamos de hermanos mayores o primos porque se nos quedaba pequeña rápidamente. Comprábamos rotuladores porque se gastaban rápido (siempre el azul el primero por eso de pintar cielos y el verde por los árboles y la hierba)… luego por las modas, porque ya no se llevan los pantalones de campana o porque ahora no se llevan los pitillo…

Las baterías de los móviles van durando menos y acabamos cambiando de teléfono por uno más moderno que luego no nos dura más de un año… ¿O es que solamente a mí me parecen que los móviles cada vez duran menos? Como solución, he pasado de un móvil pichiflú a un móvil sencillo con lo justo y necesario y sorprendentemente ha pasado los cuatro años y sigo cargándolo una vez a la semana… ahora resulta que existe una “cosa” que se llama la obsolescencia programada que allá por la crisis del 29 se le pasó a un economista por la cabeza…y que nos tiene inmersos en la rueda imparable del consumo.

En este documental flipé con las medias que no se hacían carreras y que dejaron de fabricarlas por eso, porque eran tan buenas que hubo que “empeorarlas” para que el mercado siguiera en auge… o cómo en la Alemania del este desarrollaron bombillas de larga duración con 25 años de funcionamiento o que los electrodomésticos del bloque socialista se diseñaban para que al menos duraran 25 años… Como en mi casa, que heredé la lavadora de mi abuela que debe tener casi los 20 años y en casa de mis padres, en el garaje, la nevera para las cervezas y refrescos tiene la friolera de 38 años y la única pega es que congela las latas de refrescos…

Claro es que no pensamos que todo este material que vamos renovando ocupa un espacio o lo contamina… y, lo enviamos, supongo que por módicos precios a países más pobres y así que lo acumulen ellos y ojos que no ven…. qué buena gestión medioambiental que hacemos…

… Ayer entendí porqué la impresora que tenía dejó de funcionar un día por las buenas… jamás pensé que tuviera un chip que contabilizara las copias hasta que llegase al número tope y se bloqueara… ya podía cambiar los cartuchos, limpiarla, mirar los cables y demás tonterías… qué tomadura de pelo.

Supongo que por lo mismo, las camisetas y vaqueros me duraban tanto que los arrinconaba en el armario ya harta y ahora apenas pasan la temporada… lo achacamos a que son más baratos y de peor calidad, pero en el fondo es lo mismo, la obsolescencia programada…

Bueno, que me pareció interesante y me dejó un poco flipada… así que dejo para mañana las historietas de esta mañana en el despacho (qué mañanita, si laboralmente comienzo así el 2011 en diciembre me tenéis en un sanatorio o de retiro espiritual)

4 comentarios:

  1. ¡Coño!
    Invasión zombie, impresoras con fecha de caducidad...
    Como mencionabas sobre House: Everybody lies
    Vienes guerrera este 2011... mola

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  2. Buenos días!

    Feliz Año a todos/as

    Después de una temporada desconectado de todo lo que tiene que ver con la tecnología, gadgets, ordenadores, etc. se ve la vida de otro modo... y más después de ver el documental que ambarrubia comenta. Es increíble la manipulación de los grandes, ya sean empresas, gobiernos, etc.

    Voy a ponerme al día con las últimas entradas y comentarios...

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  3. El desaparecido.... pedazo de vacaciones que te clavas... quien como tú!!!

    Ya ves que me voy aplicando con las fotos (y lo que me cuesta)... ahora hasta videos...

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  4. Es lo que tiene ser semi-funcionario...

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